El quiromasaje podría definirse como un conjunto de técnicas manuales cuyo objetivo es tratar y aliviar los dolores y tensiones del cuerpo y sus tejidos. Podríamos catalogarlo dentro del grupo de masoterapias junto al masaje turco, al tailandes, polinesio… pero su origen está en una evolución del masaje sueco.
España goza de una alta reputación en cuanto a la práctica del Quiromasaje, pues profesionales de otros países suelen venir a las escuelas españolas a formarse; y muchos universitarios titulados en Fisioterapia tras acabar su formación también, tanto nacionales como extranjeros, debido a que salen preparados en cuanto a teoría pero no tanto en cuanto a practica para ejercerla correctamente en sus puestos de trabajo llegado el momento.
Se trata principalmente para tratar tensiones y dolores en los pacientes relaciones con contracturas, enganchones musculares, tendinopatías, etc… Tambíen es muy utilizado en un aspecto deportivo para un mantenimiento físico del deportista, así como una preparación ante, durante y tras la prueba, maratón, carrera, partido…
Y son ampliamente conocidos los masajes circulatorio, de vaciaje y de drenaje linfático para tratar problemas de circulación, edemas, tobillos y piernas hinchadas, varices, arañas…
Hay pocas contraindicaciones con respecto a la terapia de quiromasaje y sus especialidades. Mas bien, tener la precaución de no pedir cita si la zona a tratar se encuentra todavía muy inflamada y caliente, o hay heridas y/o quemaduras abiertas y recientes.
Salvo en esos casos, y en personas con linfoedema e hipersensibilidad dérmica, no hay muchas más precauciones.
